Glorioso San José, fiel seguidor de Jesucristo, a ti elevamos nuestro corazón y nuestras manos, para implorar tu poderosa intercesión para obtener del Corazón de Jesús toda la ayuda y gracias necesarias para nuestro bienestar espiritual y temporal, particularmente la gracia de una muerte feliz y el favor especial que ahora imploramos.
(Mencione su petición).
Glorioso San José, por el amor que tuviste a Jesús y por la gloria de Su Nombre, escucha nuestras oraciones y obtén nuestras peticiones. Jesús, María y José nos ayudan en nuestra necesidad. Amén. Acordaos, oh castísima esposa de la Virgen María, que nunca se supo que alguno que imploraba vuestro auxilio y buscaba vuestra intercesión quedaba desamparado. Lleno de confianza en tu poder vuelo hacia ti y ruego tu protección. No desprecies, oh Guardián del Redentor, mi humilde súplica, sino que en tu generosidad, escúchame y respóndeme. Amén.
SEGUNDO DÍA : Oh bienaventurado San José, padre tierno, fiel guardián de Jesús, casto esposo de la Madre de Dios, te rogamos y te suplicamos que ofrezcas a Dios Padre, su divino hijo, bañado en sangre en la Cruz por los pecadores, y por el tres veces santo nombre de Jesús obtén para nosotros del Padre eterno el favor por el que imploramos tu intercesión…
(Exponga su solicitud aquí…)
En medio de los esplendores de la eternidad, no olvidéis los dolores de los que oran, de los que lloran; Detén el brazo todopoderoso que nos golpea, para que por tus oraciones y las de tu santísimo Esposo, el Corazón de Jesús sea movido a la piedad y al perdón. ¡San José, ruega por nosotros! Amén.